PUERTO PLATA, R.D. – El Tribunal Colegiado de Puerto Plata condenó este jueves al pelotero de Grandes Ligas Wander Franco a dos años de prisión, una pena que fue suspendida bajo condiciones especiales, tras hallarlo culpable de abuso sexual en perjuicio de una menor de edad. En el mismo fallo, Marta Vanessa Chevalier, madre de la víctima, fue sentenciada a diez años de reclusión por los delitos de explotación sexual y lavado de activos.
La decisión fue tomada por los jueces Jakayra Veras, Venecia Rojas y José Juan Jiménez, quienes consideraron probada la responsabilidad penal de ambos acusados tras evaluar más de 160 pruebas documentales y testimoniales presentadas por el Ministerio Público.
Condiciones y Justificación de la Sentencia para Wander Franco
Wander Franco fue condenado a dos años de prisión suspendida. Esta pena deberá cumplirla en el Centro de Corrección y Rehabilitación San Felipe si viola las condiciones impuestas por el tribunal. Adicionalmente, deberá pagar una multa equivalente a 10 salarios mínimos del sector público.
El tribunal explicó que, para Franco, se tomaron en cuenta factores como su juventud, su condición de infractor primario y el daño ya sufrido en su carrera profesional. No obstante, los jueces dejaron claro que su conducta fue «una mala decisión» y le impusieron condiciones estrictas. Entre ellas, deberá mantenerse alejado de menores de edad con fines sexuales. La jueza Veras advirtió: «Aunque es una persona joven, si no le gustan las personas de su edad, deberá esperar un tiempo para no reincidir en actos de esta naturaleza». En caso de violación de esta disposición, la suspensión de la pena sería revocada y Franco cumpliría los dos años de prisión efectiva.
El Ministerio Público había solicitado cinco años de prisión para Franco, pero el tribunal decidió imponerle dos, de forma suspendida.
Sentencia firme para la madre de la víctima
En cuanto a Marta Vanessa Chevalier, el tribunal fue contundente al señalar que usó a su hija como «mercancía» para obtener beneficios económicos, calificando el acto de «bochornoso, reprochable y castigado por la ley». Fue sentenciada a diez años de prisión por lavado de activos y explotación sexual de menores.
La condena se sustenta en la violación del artículo 409 del Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes (Ley 136-03), que sanciona el abuso sexual a menores de edad. El tribunal expuso que Chevalier ejercía «presión y chantaje» contra Wander Franco, corroborando así la explotación sexual de la madre y el lavado de activos por el dinero ilícito que obtuvo. También se corroboró que ella presionaba a Franco para que le diera dinero para pagar el colegio de la hija. «Una actitud bochornosa y reprochable, el tribunal acoge en todas sus partes la solicitud del Ministerio Público», dijo la jueza Veras.
El tribunal explicó que el tiempo que tomó la decisión se debió al gran volumen probatorio, aunque indicó que los fiscales redundaron con algunas pruebas. La sentencia detalla que la mujer incurrió en explotación sexual y lavado de activos al introducir bienes de origen ilícito en el sistema financiero dominicano, con una clara intención de «ocultamiento y de legalizar bienes obtenidos ilícitamente».
Un caso de alto perfil público
Este juicio ha acaparado la atención pública debido a la figura de Wander Franco, quien hasta su suspensión por parte de las Grandes Ligas era considerado una de las jóvenes promesas de los Tampa Bay Rays.
Durante el proceso, tanto Franco como Chevalier negaron los cargos y solicitaron sus respectivas absoluciones, alegando falta de pruebas y violaciones al debido proceso. La defensa del pelotero, liderada por la abogada Irina Ventura, sostuvo que «intereses externos al caso han buscado dañar su carrera». Por su parte, el abogado Yancarlos Cid, en representación de Chevalier, calificó la acusación como «imprecisa» y pidió la devolución de bienes incautados, incluyendo vehículos, terrenos y sumas millonarias en efectivo.