Donald Trump regresó a la presidencia con un enfoque agresivo en cumplir sus promesas de campaña, dejando ya una marca clara en la política nacional e internacional tras sus primeros 100 días en el cargo. Con un Congreso republicano a su favor, el presidente ha lanzado una oleada de decretos, ha reestructurado agencias y ha modificado políticas clave. Sin embargo, el impacto real de sus decisiones —entre avances, retrocesos y controversias— sigue siendo incierto.
Migración y seguridad fronteriza: prioridad cumplida
Uno de los campos donde Trump ha mostrado resultados visibles es en la reducción del cruce ilegal de migrantes por la frontera sur. De cifras cercanas a los 250 mil cruces en diciembre de 2023, los números han descendido a poco más de 7 mil en marzo de 2025. Sin embargo, este endurecimiento también ha suscitado críticas por presuntas violaciones al debido proceso, como en el caso de Kilmar Ábrego García, deportado sin audiencia previa.
Aranceles y economía: inflación vs. proteccionismo
Trump impuso aranceles masivos, incluyendo hasta un 145 % a productos chinos, como parte de su “Día de la Liberación Económica”. Aunque asegura que ya “resolvió la inflación”, la Reserva Federal advierte que estos aranceles podrían elevar precios al consumidor. Además, los mercados han mostrado inestabilidad, y no se han presentado aún resultados tangibles en las facturas de servicios públicos, una de sus promesas bandera.
Guerra en Ucrania: promesa incumplida
Trump aseguró que terminaría la guerra entre Rusia y Ucrania “en un día” tras asumir el cargo. Esa paz no ha llegado. Aunque mantiene una postura crítica hacia el conflicto, no se ha concretado ningún avance real en su resolución, debilitando una de sus promesas de campaña más ambiciosas.
Política fiscal: recortes estancados
Prometió eliminar impuestos sobre propinas, horas extra y la Seguridad Social, pero hasta ahora no ha pasado legislación al respecto. Su plan de hacer permanentes los recortes fiscales de su primer mandato también enfrenta dificultades por divisiones internas en el Congreso, incluso dentro de su propio partido.
Cultura y educación: ofensiva contra lo “woke”
Trump ha dirigido ataques frontales contra programas DEI (Diversidad, Equidad e Inclusión), instituciones académicas como Harvard, y ha promovido una narrativa de restaurar los “valores tradicionales”. Ha congelado fondos, revocado contratos y amenazado con retirar exenciones fiscales a universidades.
Medioambiente: entre el petróleo y la retórica
Aunque ha firmado órdenes para eliminar restricciones ambientales, muchas de sus acciones han sido simbólicas o dependen del Congreso. No ha logrado revertir la exención de California para eliminar autos de gasolina, y su anuncio de derogar el “mandato de vehículos eléctricos” fue en realidad contra un objetivo no vinculante.
Derechos civiles y políticas de género: ofensiva conservadora
En línea con su discurso de campaña, ha firmado decretos contra atletas trans en deportes femeninos, intentado vetar su presencia en el ejército, y promueve activamente una agenda que excluye el reconocimiento de identidades de género no binarias.
Indultos masivos: 6 de enero
Una de las medidas más polémicas fue el indulto masivo a más de 1,500 personas involucradas en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, a quienes ha llamado “rehenes del sistema”. Lo hizo el primer día de su mandato.
DOGE: el plan de eficiencia de Musk
El empresario Elon Musk lidera el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una propuesta de Trump para eliminar la burocracia. Aunque prometieron ahorrar 1 billón de dólares, el nuevo cálculo de ahorro se redujo a 150 mil millones y aún no hay evidencia clara del impacto real.
