WASHINGTON D.C., ESTADOS UNIDOS. – El presidente estadounidense Donald Trump lanzó una dura advertencia a Irán, asegurando que «si la paz no llega pronto» tras el ataque de Estados Unidos a sus principales instalaciones nucleares, «iremos por esos otros objetivos, con precisión, velocidad y destreza». Estas declaraciones se produjeron durante un discurso en la Casa Blanca, donde confirmó una «operación militar muy exitosa» que incluyó el bombardeo de la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordow.
Durante su comparecencia, Trump enfatizó la gravedad del momento para Teherán: «Habrá paz o una tragedia para Irán mucho mayor que la que hemos presenciado en los últimos ocho días. Recuerden, aún quedan muchos objetivos por alcanzar», sentenció el mandatario, instando a Irán a optar por la paz.
Detalles del ataque y felicitaciones de Netanyahu
La ofensiva estadounidense, según revelaciones, empleó «entre cinco y seis bombas antibúnker» lanzadas desde bombarderos B-2, complementadas con una treintena de misiles Tomahawk disparados desde submarinos y destructores. El objetivo fueron las tres instalaciones nucleares clave de Irán: Fordo, Natanz e Isfahán. Trump había declarado previamente en su red Truth Social que «se lanzó una carga completa de BOMBAS sobre la instalación principal, Fordo», y confirmó que «todos los aviones están de regreso», felicitando a las fuerzas armadas estadounidenses. Este ataque ocurre en un momento de escalada, con Irán enfrentando una guerra contra Israel desde hace diez días.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, no tardó en felicitar a Trump por su «audaz decisión» de bombardear las instalaciones nucleares. En un video publicado en su cuenta de X, Netanyahu reiteró su filosofía: «La paz se logra con la fuerza… Y esta noche, @realDonaldTrump y Estados Unidos actuaron con mucha fuerza».

Condena bipartidista en el Congreso y debate constitucional
Sin embargo, la decisión de Trump ha generado una fuerte condena en el Congreso de EE.UU., tanto por parte de republicanos como demócratas, quienes denuncian que el ataque fue inconstitucional y debió haber pasado por la aprobación del Legislativo.
El congresista republicano Thomas Massie calificó la acción como «no constitucional». Desde el Partido Demócrata, Jim Himes y Alexandria Ocasio-Cortez recordaron que los congresistas deben tener voz en este tipo de asuntos «antes de que caigan las bombas». Ocasio-Cortez aseguró que la «desastrosa decisión del Presidente de bombardear Irán sin autorización es una grave violación de la Constitución y de los poderes de guerra del Congreso».
El representante demócrata Sean Casten fue más allá, afirmando que, al margen «de los méritos del programa nuclear iraní», ni Trump ni ningún otro presidente estadounidense tiene autoridad «para bombardear otro país que no represente una amenaza inminente para Estados Unidos». Casten incluso advirtió que «esto constituye un delito inequívoco que justifica un juicio político».
Según la legislación estadounidense, es el Congreso quien tiene el poder exclusivo para declarar la guerra. Los críticos equiparan el ataque contra las instalaciones iraníes con un acto de guerra contra Irán, en un conflicto que ya ha visto un intercambio directo de ataques entre Irán e Israel.
La decisión de Trump ha dividido a los republicanos, que antes dudaban sobre una intervención en Oriente Medio. Mientras Massie se opuso, el senador republicano por Texas, John Cornyn, defendió el ataque como «la decisión correcta». La controversia promete intensificarse en los próximos días en Washington.