Río de Janeiro, Brasil. – El gobierno estatal de Río de Janeiro anunció la incautación de más de 2 millones de dólares en armamento de guerra, incluyendo fusiles AK-47 y FAL, tras la megaoperación policial del pasado martes, la más letal en la historia de Brasil.
La operación, llevada a cabo en dos complejos de favelas contra el Comando Vermelho (uno de los principales grupos criminales), resultó en la muerte de al menos 117 presuntos delincuentes y 4 policías.
- Incautación récord: Las autoridades confiscaron 120 armas, incluyendo 93 fusiles, valoradas en $12.8$ millones de reales (unos 2.4 millones de dólares).
- Origen internacional: Según el secretario de la policía civil, Felipe Curi, parte del armamento proviene de otros países como Venezuela, Argentina, Perú, Bélgica, Rusia y Alemania, e incluye modelos utilizados en zonas de conflicto.
- Escenario de guerra: Curi afirmó que el arsenal incautado es «típico de un escenario de guerra» y anunció que se investigarán las rutas de tráfico utilizadas por los grupos criminales.
La operación ha generado críticas de residentes de las favelas y organismos de derechos humanos por su mano dura, especialmente a pocos días de que Brasil acoja la COP30.
Sin embargo, encuestas recientes indican que la mayoría de los brasileños aprueba la acción policial, calificada como «un éxito» contra el «narcoterrorismo» por el gobernador conservador Cláudio Castro.
En respuesta a las críticas de laxitud en seguridad, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva anunció un proyecto de ley que propone una pena de 30 años de prisión para los miembros de facciones criminales. Además, sancionó una ley que robustece la lucha contra el crimen organizado, tipificando como delito la conspiración y obstrucción.






