El Bronx, Nueva York. Un caso conmocionó a la comunidad de Wakefield la noche del pasado viernes, cuando las autoridades encontraron los cuerpos sin vida de Lisa Cotton, de 38 años, y su hijo Nazir Millien, de 8 años, en avanzado estado de descomposición dentro de su apartamento en East 231st Street. En la misma escena, la hija menor de Cotton, de apenas cuatro años, fue hallada con vida, aparentemente alimentándose solo de chocolates durante varios días.
La alarmante situación fue descubierta luego de que la hija mayor de Cotton se presentó en la vivienda, alertada por los vecinos que no veían a la familia desde hacía dos semanas. Al ingresar, encontró al niño encorvado en su silla y a la pequeña, identificada como Promise, recostada sobre la cama de su madre cubierta de restos de chocolate.
Según la policía, no se hallaron signos de violencia física en los cuerpos. Las autoridades sospechan que Lisa Cotton, quien padecía de asma y enfrentaba problemas de salud mental, pudo haber sufrido un paro cardíaco. En tanto, el niño, que era alimentado por una sonda, habría muerto por inanición.
Promise fue trasladada a un hospital local, donde se encuentra en condición estable. Aún no está claro cuántos días permaneció sola con los cuerpos, aunque vecinos indican que el olor se había vuelto insoportable desde hacía al menos una semana.
Control de bienestar y advertencias previas
El Departamento de Policía de Nueva York había realizado un control de bienestar el martes anterior tras una llamada anónima al 911, pero al no obtener respuesta en la puerta del apartamento, optaron por retirarse. Según un vecino, una trabajadora social mencionó estar intentando obtener una orden judicial para entrar al lugar.
Fue el abuelo de los niños, Hubert Cotton, de 71 años, quien envió a la hija mayor de Lisa tras recibir una llamada del casero preguntando si su hija se había mudado. “Estuve días llamándola, pero no me respondía. Supuse que no quería hablar conmigo”, declaró entre lágrimas a The New York Post.
Hubert ahora cuida de la pequeña Promise. “No ha dicho nada. A veces me mira, como si supiera algo… estamos tratando de entenderlo todo”, afirmó.
Antecedentes e intervención de servicios sociales
Lisa Cotton tenía un historial de episodios psiquiátricos y había sido arrestada en junio de 2021 por abandono infantil. En aquella ocasión fue vista actuando de forma errática en la vía pública. A pesar de ello, el caso fue posteriormente archivado por la Administración de Servicios Infantiles (ACS).
Vecinos relataron comportamientos preocupantes previos. “Una vez tiró pintura por la ventana, otra vez subió a la azotea con su hijo hablando de suicidarse”, comentó una residente llamada Sharlene. Otros vecinos cuestionaron la actuación de ACS. “En cierto modo los culpo. Deberían haber hecho más desde el principio”, señaló Mark, otro residente del edificio.
La agencia ACS informó que el caso está siendo investigado.