WASHINGTON, D.C. – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles una nueva proclamación que prohíbe la entrada a Estados Unidos a ciudadanos de 12 países y restringe la de otros siete. La Casa Blanca informó que esta medida fue tomada para «proteger a los estadounidenses de actores extranjeros peligrosos».
La prohibición total afecta a ciudadanos de Afganistán, Birmania, Chad, República del Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen.
Asimismo, la entrada a Estados Unidos ha sido restringida para los ciudadanos de Cuba, Venezuela, Burundi, Laos, Sierra Leona, Togo y Turkmenistán, según el documento publicado por la Casa Blanca.
Trump justificó esta drástica medida citando un reciente ataque contra una protesta judía en Boulder, Colorado, que las autoridades han atribuido a un individuo que, según su declaración, se encontraba ilegalmente en el país. «El reciente ataque terrorista en Boulder, Colorado, ha puesto de relieve los peligros extremos que supone para nuestro país la entrada de extranjeros que no han sido debidamente investigados», afirmó el presidente Trump en un vídeo difundido.
Esta nueva directriz migratoria refuerza la postura de la administración Trump en materia de seguridad nacional y control fronterizo, generando un amplio debate sobre sus implicaciones en la política exterior y los derechos humanos.