Washington (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este martes una orden ejecutiva destinada a reducir drásticamente la plantilla del Gobierno federal y otorgar mayor autoridad al nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), dirigido por el empresario Elon Musk.
En un acto en el Despacho Oval, Trump compareció junto a Musk, quien lucía una gorra con el eslogan de campaña “Make America Great Again” (Hacer a EE.UU. grande de nuevo) y estaba acompañado por su hijo, X Æ A-Xii.
Trump cedió rápidamente la palabra a Musk, quien calificó a la Administración federal como una “cuarta rama no electa” y defendió la necesidad de implementar medidas drásticas para recortar el gasto público. El empresario aseguró que “controles de sentido común” pueden eliminar gastos innecesarios.
Conflictos de interés y polémica
Musk restó importancia a las críticas sobre su nuevo papel en el Gobierno, a pesar de que seis de sus empresas están bajo investigaciones o medidas regulatorias de agencias federales que ahora podrían verse afectadas por sus decisiones.
«Intento ser lo más transparente posible, pero no tengo intención de publicar mis declaraciones financieras», afirmó Musk ante los periodistas. «La transparencia es lo que genera confianza», añadió.
Trump respaldó a Musk, negando cualquier conflicto de interés y denunciando la existencia de “fraude y abuso” en la adjudicación de contratos públicos. Según el mandatario, las reformas evitarán el despilfarro de “decenas de miles de millones de dólares”.
Reducción de plantilla y limitación de contrataciones
La orden ejecutiva exige a todas las agencias federales colaborar con el DOGE para reducir personal y restringir nuevas contrataciones, con el objetivo de disminuir significativamente el tamaño del Gobierno federal.
Según documentos compartidos con The Washington Post, la orden establece que solo se podrá contratar a un nuevo empleado por cada cuatro bajas. Sin embargo, se harán excepciones para los sectores de seguridad nacional y control migratorio.
Impacto y controversias
Las primeras acciones del DOGE ya han generado una gran polémica. Entre las medidas más polémicas se encuentran:
- El desmantelamiento de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID).
- El cierre de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB), creada tras la crisis financiera de 2008.
El desmantelamiento de estas agencias ha provocado demandas y dejado a miles de funcionarios en la incertidumbre sobre su futuro laboral, lo que podría derivar en un caos administrativo.
Un futuro incierto
El alcance total de estas reformas aún no está claro, pero analistas advierten que la consolidación del poder en manos del DOGE podría transformar radicalmente la estructura gubernamental estadounidense. La supervisión directa de Elon Musk en estos procesos ha generado dudas sobre la imparcialidad y las consecuencias para las agencias reguladoras.