SANTO DOMINGO, RD. – El presidente Luis Abinader reiteró este lunes la necesidad imperante de reformar tanto el Código Penal como el Código Procesal Penal para endurecer las penas. El mandatario aseguró que las leyes actuales no responden adecuadamente a las demandas de seguridad y justicia de la sociedad dominicana.
«Hay que endurecer las penas, tenemos que endurecer las penas, y por eso incluso mandamos algunas modificaciones previas tanto al Código Penal como al Procesal Penal, que lo había enviado desde la Consultoría (Jurídica al Congreso Nacional), de acuerdo con la Procuraduría», manifestó Abinader durante el programa «LA Semanal con la Prensa».
El presidente reconoció que es esencial reforzar el régimen de consecuencias en el Código Penal. «Nuestros códigos, repito, necesitan endurecer las penas, en especial el Código Penal. Eso es fundamental, porque la verdad es que tanto la Policía como la Justicia, en algunos casos, se les hace difícil cumplir con las necesidades que tiene la sociedad actual», afirmó.
Aceleración de estudios y petición de Yeni Berenice Reynoso
Desde hace más de una semana, la comisión bicameral que estudia la propuesta del nuevo Código Penal ha acordado acelerar los trabajos con jornadas extendidas, incluyendo análisis hasta tres días a la semana en encuentros que duran nueve horas. La propuesta abarca temas directamente enfocados en la mujer, como las penas por feminicidios, violencia intrafamiliar, violencia sexual, actividad sexual no consentida, agresiones sexuales, acoso y el controversial tema del aborto.
A mediados de mes, la procuradora general de la República, Yeni Berenice Reynoso, también exhortó al Congreso Nacional a aprobar el proyecto del nuevo Código Penal. Según Reynoso, es crucial actualizar la ley para evitar que los delitos sean sancionados con penas «irrisorias».
«Tenemos un marco jurídico desactualizado con penas irrazonables que, en muchos casos, no son ni mínimamente proporcionales al daño causado», dijo la procuradora, explicando que la falta de un Código Penal actualizado obliga al Ministerio Público a calificar como delitos culposos muchas conductas que en realidad responden a dolo eventual, limitando la correcta tipificación de los hechos y la aplicación de sanciones justas.
El Código Penal dominicano data de 1884, a pesar de haber sido objeto de algunas modificaciones a lo largo del tiempo.