Santo Domingo, D.N. – El Banco Popular Dominicano, en conjunto con AZUL, marca de Servicios Digitales Popular, y GCS International, anunció la integración de las terminales de pago de AZUL para operar como subagentes bancarios, una medida orientada a fortalecer la inclusión financiera en todo el país.
En esta primera fase, unos 300 comercios afiliados a AZUL ya ofrecen servicios como pagos de tarjetas de crédito, préstamos y otros compromisos financieros mediante las terminales habilitadas.
Este modelo busca acercar los servicios bancarios a zonas donde no hay acceso directo a sucursales, permitiendo a los ciudadanos realizar operaciones en los comercios que frecuentan, con tecnología respaldada por la plataforma Mi Punto, de GCS International, filial de Grupo Popular.
Una red de servicios en expansión
De acuerdo con la información ofrecida, en una segunda etapa de implementación se incluirán funcionalidades adicionales como retiros, depósitos en efectivo y la afiliación a billeteras prepagadas, lo que ampliará aún más las posibilidades de transacción para los usuarios.
La intención del proyecto es extender progresivamente esta modalidad a los miles de comercios afiliados a AZUL en todo el país, con un enfoque especial en comunidades con limitada presencia bancaria tradicional.
- La tecnología que permite esta transformación es provista por GCS International, a través de su red Mi Punto, diseñada para realizar transacciones seguras y confiables.
La integración con las terminales de AZUL responde a la estrategia del Banco Popular de llevar la banca a donde están las personas, promoviendo soluciones prácticas tanto para los consumidores como para los pequeños y medianos comercios, que incrementan su flujo de clientes al convertirse en puntos de servicio financiero.
Subagente Popular: más de 2,300 comercios afiliados
Desde su lanzamiento en 2014, la red Subagente Popular ha tenido una expansión constante, cerrando 2024 con 2,330 comercios afiliados autorizados, lo que representa un crecimiento del 17 % respecto al año anterior.
Esta red se ha convertido en una herramienta clave para promover la bancarización de sectores tradicionalmente excluidos, brindando acceso a servicios básicos como pagos, consultas y operaciones cotidianas sin necesidad de acudir a una oficina bancaria.
Inclusión financiera como eje del modelo
Los subagentes bancarios operan en negocios de proximidad, como colmados, farmacias o tiendas por departamentos, lo que permite fomentar la confianza en el sistema financiero, acercar la educación financiera a nuevos usuarios y reducir las brechas geográficas en el acceso a servicios bancarios.
La implementación de terminales con funcionalidades bancarias representa un paso adicional en el esfuerzo de modernizar la red de servicios y construir una banca más accesible y descentralizada, al alcance de todos los sectores de la población.