ESTAMBUL. – El Monte Etna, el volcán más activo de Europa, ha entrado en una nueva fase eruptiva este lunes, elevando una impresionante columna de humo negro y cenizas varios kilómetros sobre el cielo de Sicilia, Italia. Esta actividad volcánica se ha registrado en el cráter sudeste del volcán, con flujos de material incandescente que han superado el borde del Valle del Leone.
Según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), la actividad explosiva ha generado fuentes de lava que fueron visibles desde las primeras horas del día. Esta erupción marca la decimocuarta vez en los últimos meses que el Etna presenta una fase activa, demostrando su constante dinamismo.
Situación actual y precauciones
Las autoridades de vulcanología italianas han emitido un comunicado instando a la población a tomar las debidas precauciones, aunque por el momento, la erupción no se considera peligrosa para los centros habitados. El material caliente no ha superado un valle a 2,800 metros de altitud, lo que ha evitado mayores riesgos.
La ausencia de viento y el cielo despejado en esta ocasión impidieron que la nube de ceniza se desplazara hacia Catania, lo que ha permitido que el aeropuerto de esta ciudad, el Aeropuerto Internacional Vincenzo Bellini, mantenga sus operaciones de llegada y salida de vuelos con normalidad.
El nivel de alerta para el Etna actualmente es amarillo, aunque se ha recomendado la «máxima precaución» a los excursionistas y se ha prohibido el acceso a las áreas más altas de la cima del volcán hasta nuevo aviso, debido a la potencial evolución del fenómeno.
El Etna: Un estratovolcán en constante actividad
El Etna es un estratovolcán complejo, cuya altura y forma varían con el tiempo debido a sus continuas erupciones. Considerado uno de los volcanes más activos del mundo, es un espectáculo natural que atrae tanto a científicos como a turistas, a pesar de su imprevisibilidad.
Las observaciones preliminares indican una actividad de tipo ‘estromboliana’, caracterizada por explosiones que liberan una «modesta» energía, acompañada de un incremento gradual en los temblores volcánicos. Expertos del observatorio del Etna continúan monitoreando minuto a minuto la evolución de la actividad para anticipar cualquier cambio significativo en su comportamiento.