Desde que el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron renunciar a sus deberes reales en 2020, la pareja ha estado bajo el escrutinio constante de la prensa. A pesar de sus esfuerzos por construir una vida independiente en Estados Unidos, las especulaciones sobre su relación no han cesado. Ahora, nuevos rumores apuntan a una posible crisis matrimonial, alimentando la expectativa de un divorcio que muchos parecen estar esperando.
El peso de los rumores y el rol de los medios
Los medios británicos y estadounidenses han seguido cada paso de los duques de Sussex, y recientemente, el podcast The Rest Is Entertainment avivó las teorías sobre su posible separación. Según la coanfitriona Marina Hyde, un divorcio podría cambiar el control de los acuerdos comerciales de la pareja, generando un nuevo escenario para sus negocios.
Aunque un portavoz de la pareja desmintió los rumores, la narrativa de una ruptura sigue en el aire, impulsada por la percepción de que su relación es más un producto mediático que una unión estable.
Las consecuencias de una posible separación
Un eventual divorcio entre Meghan y Harry no solo tendría un impacto personal, sino también financiero y profesional. Se estima que Meghan podría recibir hasta 80 millones de dólares como parte del acuerdo de separación, cifra que cubriría la manutención de sus hijos y compensaría la pérdida de influencia ligada a la familia real.
Además, su contrato de 100 millones de dólares con Netflix podría ser reevaluado. Mientras algunos críticos consideran que los resultados de esta asociación han sido irregulares, otros creen que el morbo de una ruptura podría generar nuevas oportunidades en el entretenimiento.
Meghan y su estrategia de marca personal
Desde su salida de la monarquía, Meghan ha trabajado para fortalecer su imagen, abordando temas como el feminismo, el racismo y la salud mental. No obstante, también han surgido informes que sugieren que podría estar planeando un libro sobre su relación con Harry, lo que refuerza la idea de que su historia sigue siendo un activo comercializable.
¿Amor genuino o estrategia pública?
- Pese a los rumores, la pareja sigue mostrándose unida en eventos públicos, como los Juegos Invictus en febrero de 2025, donde compartieron momentos de complicidad ante las cámaras. Sin embargo, expertos en lenguaje corporal han señalado que estos gestos podrían ser parte de una estrategia para acallar las especulaciones.
Un matrimonio bajo presión
Más allá de los rumores, la relación de Meghan y Harry está sometida a una presión única: el constante escrutinio mediático, las diferencias culturales y la divergencia en sus objetivos personales. Mientras Harry parece interesado en fortalecer lazos con el Reino Unido, Meghan sigue enfocada en su carrera en Estados Unidos.
La verdad es que, por ahora, no hay pruebas concretas de una separación. Sin embargo, el mundo seguirá observando cada movimiento de la pareja, esperando señales que confirmen o desmientan los rumores. ¿Lograrán superar las adversidades, o el divorcio es solo cuestión de tiempo? Solo el tiempo lo dirá.