SANTO DOMINGO, R.D. – Hablar en voz alta, conocido como «auto habla» o «pensar en voz alta», es una práctica que, a pesar de las percepciones sociales que a veces la asocian con irracionalidad, es cada vez más respaldada por la psicología moderna debido a sus numerosos beneficios cognitivos y emocionales.
La psicóloga clínica Likaurys García asegura que este comportamiento, aunque no es habitual en todas las personas, se encuentra comúnmente asociado con individuos extrovertidos, creativos y con una marcada tendencia a la automotivación. «Independientemente de que se llame, que pueden ser personas locas», afirmó García, desmitificando la creencia popular.
Beneficios del «Auto Habla» según la Especialista
De acuerdo con la psicóloga García, «hablar solo no tiene ningún problema». De hecho, es una práctica común que la psicología moderna ofrece una serie de ventajas:
- Ayuda a la organización del pensamiento: Facilita ordenar y clarificar las ideas.
- Refuerzo de la memoria: Mantiene la mente activa y ayuda a recordar lo que se está haciendo.
- Regulación emocional: Permite identificar y procesar sentimientos, ayudando a saber cuándo se siente bien o a reconocer emociones.
- Automotivación: Sirve como una herramienta interna para impulsarse a uno mismo.
- Autoguía para la comprensión y el aprendizaje: Mejora la asimilación de nueva información y la resolución de problemas.
- Ayuda a la socialización interna: Contribuye a una mejor autocomprensión.
- Brinda más confianza: Puede mejorar la seguridad al dirigirse a un público o en ambientes sociales.
¿Es un signo de inestabilidad mental? ¿Cuándo buscar ayuda?
García enfatiza que hablar solo «no es erróneo». Sin embargo, la clave está en la frecuencia y el impacto en la vida diaria. Cuando este hábito interfiere con el funcionamiento cotidiano o se vuelve excesivo, ocupando la mayor parte del tiempo de una persona, «suele tener implicaciones patológicas y se debe buscar ayuda», aclaró la especialista.
Hablarse a sí mismo una o dos veces al día no tiene implicaciones negativas, siendo una forma natural de procesar pensamientos, expresar ideas o encontrar soluciones internas que fomenta la autorreflexión.
El autodialogo en niños
Gary Lupyan, profesor asociado de psicología en la Universidad de Wisconsin, Estados Unidos, explicó a la BBC que esta técnica no es exclusiva de los adultos. Los niños también se hablan a sí mismos para autodirigirse en tareas cotidianas, como atarse los cordones de los zapatos o vestirse. Esta práctica les permite guiarse a través de pasos secuenciales, promoviendo la autodisciplina y el aprendizaje, consolidándose como una herramienta cognitiva que trasciende la simple comunicación.
Los expertos concluyen que el auto-diálogo se convierte en una forma de socialización interna que fomenta la autocomprensión y el procesamiento emocional, validando su valor como una función cerebral natural y beneficiosa.