El fundador y director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, ha revelado que el megacohete Starship realizará sus primeras misiones no tripuladas a Marte en 2026, con el objetivo de probar la capacidad del vehículo para aterrizar de manera segura en el planeta rojo. Según Musk, si estas pruebas resultan exitosas, los primeros vuelos tripulados podrían llevarse a cabo en un plazo de cuatro años.

En su cuenta en la red social X, Musk explicó que el propósito a largo plazo es construir una ciudad autosuficiente en Marte en unos 20 años, con la visión de convertir a la humanidad en una especie multiplanetaria. «Ser multiplanetario aumentará enormemente la probable vida útil de la conciencia«, comentó, destacando la importancia de no depender únicamente de la Tierra.

El poderoso cohete Starship

El Starship, compuesto por el propulsor Super Heavy y una nave espacial de 50 metros, es el cohete más grande y potente jamás construido. Con una altura total de 122 metros y un empuje de 16,7 millones de libras, supera al cohete SLS de la NASA, usado en el programa lunar Artemis. A diferencia del SLS, el Starship está diseñado para ser completamente reutilizable, lo que permitirá relanzamientos rápidos y eficientes.

Hasta ahora, SpaceX ha realizado cuatro misiones de prueba del Starship, con mejoras en cada vuelo, incluido un exitoso amerizaje tras un vuelo orbital. El quinto vuelo, previsto para el futuro, buscará aterrizar el Super Heavy en el soporte de lanzamiento, utilizando los innovadores «brazos de palillo» de la torre de lanzamiento.