Por: Valerie Acosta Nova
Conforme se acercan las elecciones presidenciales en nuestro país las tensiones políticas se intensifican. Los candidatos presidenciales se encuentran en una fase crucial, intensificando sus esfuerzos de campaña al presentar sus propuestas en un intento por consolidar sus bases de apoyo y conquistar el favor del pueblo dominicano.
Bajo el estandarte de “Primero la Gente”, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha centrado su plan de gobierno en mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, comprometiéndose a transformar los servicios públicos, crear empleos y ofrecer más oportunidades equitativas para todos los dominicanos, haciendo hincapié en la sostenibilidad ambiental.
En medio de un contexto económico desafiante, marcado por los altos precios de la canasta básica, los bajos ingresos y el desempleo, el programa de gobierno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) aspira a asegurar un futuro seguro a los dominicanos, bajo el lema “Servir al Partido, para Servir al Pueblo”.
A su vez, la Fuerza del Pueblo ha presentado su programa de gobierno orientado a lograr el progreso, la equidad social y la justicia, comprometiéndose a abordar las deficiencias del pasado. Su plan busca fomentar la transparencia con indicadores claros y métodos rigurosos, implementar plataformas digitales interactivas, programas de seguridad ciudadana y promover la profesionalización del servicio público, todo con el objetivo de crear una sociedad más justa y segura.
En este paisaje político, los ciudadanos se erigen como los verdaderos protagonistas, pues tendrán la responsabilidad de tomar decisiones trascendentales en las próximas elecciones, evaluando cuidadosamente las propuestas y compromisos de cada partido, para determinar el rumbo del país en los años venideros.
