La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos publicó un informe sobre la grave crisis política y de seguridad que vive Haití, donde al menos 2.439 personas han muerto en lo que va de año por la violencia de bandas, y concluye que hay una necesidad urgente de intervención internacional.
El documento ha sido elaborado por el experto William O’Neill, designado por Türk para analizar la situación de Haití, país que visitó el pasado mes de junio, y muestra una descarnada imagen de la situación que vive el país caribeño, donde también se han registrado al menos 951 secuestros por bandas este año.
Estas bandas, originalmente milicias contratadas por políticos y empresarios para su propia seguridad, «han evolucionado hasta ser grupos autónomos que controlan grandes extensiones de territorio», señala el texto.
Estas bandas estarían detrás de los al menos 32 asesinatos de policías que ha habido este año, ocupan desde 2021 el Palacio de Justicia de la capital Puerto Príncipe, y, en resumen, «han convertido en insoportable la vida de muchos en la capital y otras partes del país».