La pareja aprovechó la ocasión para charlar con el personal sobre los preparativos de cara al largo fin de semana de la coronación
En un hecho muy inhabitual, los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, tomaron el jueves el metro para ir a un pub londinense donde fueron aclamados por una multitud de curiosos dos días antes de la coronación del rey Carlos III.
«Noticia de última hora: miembros de la familia real visitan un pub en Soho», titularon los canales de televisión británicos mientras emitían imágenes del hijo mayor del rey y su esposa dándose un baño de multitudes.
Buscando proyectar una imagen de pareja moderna, glamurosa y popular, Guillermo, de 40 años, y Catalina, de 41, tomaron el metro hasta ese popular barrio del centro de Londres conocido por su animada vida nocturna.
El viaje -que incluyó tres paradas en la moderna línea isabelina, inaugurada el año pasado-también fue ampliamente comentado en los canales de noticias locales.
A continuación, los príncipes de Gales se dirigieron a pie al pub saludando a los curiosos. Después, frente a las cámaras, Guillermo pasó detrás del mostrador para servirse su propia cerveza de barril.
La pareja aprovechó la ocasión para charlar con el personal sobre los preparativos de cara al largo fin de semana de la coronación, en que se esperan decenas de miles de visitantes en la capital.
Muy populares entre los británicos, Guillermo y Catalina tienen la difícil tarea de rejuvenecer una monarquía que despierta escaso entusiasmo entre las generaciones más jóvenes.