Bruselas, 30 jul (EFE).- La Unión Europea (UE) ha estado examinando durante meses los ingredientes de diversos snacks y, en noviembre del año pasado, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) reveló que ocho aromas de humo artificiales utilizados en estos productos pueden presentar riesgos significativos de genotoxicidad, lo que implica que pueden causar diversas enfermedades, incluyendo algunas formas de cáncer.
Estos aromas artificiales también están presentes en otros productos y salsas, como las de barbacoa, embutidos, quesos e incluso algunos pescados. Por lo tanto, la nueva regulación de la UE afectará a una amplia gama de productos habituales en los supermercados, obligando a las empresas a adaptarse a las nuevas normas o, en su defecto, retirar estos productos del mercado.
Para facilitar esta transición, los legisladores europeos han otorgado a las empresas un periodo de cinco años para eliminar completamente estos compuestos de sus productos. Esta medida busca asegurar que los consumidores puedan seguir comprando productos seguros y de alta calidad sin comprometer su salud.
Un producto que se haya elaborado utilizando métodos tradicionales de ahumado debe estar claramente etiquetado como «aromatizantes naturales». Este etiquetado indica que se han seguido los métodos tradicionales de producción, permitiendo que productos como el salmón ahumado y el queso Idiazábal, que se producen de manera tradicional con humo natural, sigan disponibles para los consumidores y no desaparezcan de las tiendas.