REDACCÓN.- Cada 23 de septiembre, el mundo celebra el Día Internacional de las Lenguas de Señas, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para concienciar sobre la importancia de estas lenguas en la plena realización de los derechos humanos de las personas sordas.
Esta jornada busca resaltar la riqueza y diversidad de las lenguas de señas en todo el mundo, promoviendo su inclusión en los distintos ámbitos de la vida social, educativa y laboral.
Con más de 70 millones de personas sordas en el mundo, el uso de la lengua de señas no es homogéneo, ya que cada país e incluso cada comunidad tiene su propio sistema de señas. Desde la Lengua de Señas Mexicana (LSM) hasta la Lengua de Señas Americana (ASL), estas lenguas juegan un papel fundamental en garantizar la inclusión y la accesibilidad para la comunidad sorda.
El lema de este año subraya la importancia de “la inclusión para todos”, recordando que las lenguas de señas son un pilar en la construcción de una sociedad inclusiva y respetuosa de las diferencias. A pesar de los avances, muchas personas sordas aún enfrentan barreras para acceder a la educación, el empleo y servicios esenciales debido a la falta de reconocimiento y apoyo hacia las lenguas de señas.
El Día Internacional de las Lenguas de Señas se enmarca en la Semana Internacional de las Personas Sordas, que busca visibilizar los retos y logros de esta comunidad. La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, adoptada en 2006, reconoce explícitamente el derecho de las personas sordas a usar lenguas de señas y destaca la necesidad de promover su aprendizaje en la educación.
Organizaciones como la Federación Mundial de Sordos lideran acciones para asegurar que los gobiernos y las instituciones adopten políticas que apoyen el uso de las lenguas de señas, además de promover la formación de intérpretes profesionales y la enseñanza de estas lenguas desde edades tempranas.