Atardecer.- El martes 13 es una fecha cargada de supersticiones y miedos que han perdurado a lo largo de los siglos en diversas culturas. Tradicionalmente considerado un día de mala suerte, este día ha sido asociado con numerosos mitos y leyendas que han influido en la percepción colectiva desde tiempos antiguos hasta la actualidad.
El temor al martes 13 proviene de la combinación de dos creencias distintas: una relacionada con el número 13 y otra con el martes. En el tarot, el número 13 representa la muerte y es visto como el primero después de un ciclo completo de 12, simbolizando nacimiento, muerte y regeneración.
En la mitología nórdica, se cuenta que 12 dioses fueron invitados a un banquete en el Walhalla, pero Loki, el espíritu de la pelea y el mal, se presentó sin invitación, elevando el número de comensales a 13. Esto desencadenó una pelea en la que murió Balder, el dios favorito, lo que generó la asociación del número 13 con la mala suerte.
Otra creencia relacionada con el número 13 proviene de la Última Cena, donde Jesús y sus apóstoles eran 13, uno de los cuales lo traicionó. Desde entonces, se considera de mal augurio que 13 personas compartan la misma mesa.
El día «martes» también está cargado de connotaciones negativas. Derivado del nombre del planeta Marte, asociado en la Edad Media con «el pequeño maléfico«, Marte es el dios de la guerra, simbolizando destrucción, sangre y violencia. Un evento histórico que refuerza estas creencias es la caída de Constantinopla a manos de los turcos un martes 29 de 1453, lo que representó un duro golpe para el mundo cristiano. Además, se dice que un martes 13 fue el día en que ocurrió la confusión de las lenguas en la Torre de Babel.
Para muchos, el martes 13 es un día para evitar ciertas actividades y situaciones, y para realizar rituales destinados a protegerse de la mala suerte. Entre estos ritos destacan llevar una pata